viernes, 10 de septiembre de 2010

Tiempo huyendo



'La persistencia de la memoria' por Salvador Dalí (1931)


”Someday I’ll wish upon a star
And wake up where the clouds are far
Behind me.
Where troubles melt like lemon drops
Away above the chimney tops
That’s where you’ll find me”.

Esta semana se podría calificar como una de las semanas más ajetreadas que he tenido en mi vida y sólo puedo decir que no me gusta. Claro, aprovecho todo el día haciendo esto por aquí y a tal hora esto otro por allá; pero en realidad siento que me pierdo en el tiempo. Siento que el tiempo me consume y no me deja ‘vivir’.

Odio la vida agitada del siglo XXI. Es como si todos estuvieran en su mundo llendo de un lado a otro sabiendo exactamente a donde se dirigen. Esa determinación a veces es necesaria pero ¿durante toda una vida? ¿En serio quieren vivir toda una vida sabiendo hacia donde van y que van a vivir? La magia de la vida está en su misterio; en el misterio del qué pasara ahora y del qué será de mí.

Siento que es nuestra sociedad se ha perdido el verdadero tiempo, de otro modo, el tiempo para pensar, para reflexionar, para descansar, para disfrutar o simplemente para pensar en nada. Y es que es necesario, es necesario algunas veces pensar en nada. Es como un respiro para tu mente y cuerpo. Es un STOP a tu vida. Se necesita y siento que no tengo tiempo para ese STOP, para ese descanso, para ese disfrute.

Lo decidí hace algunas semanas y ésta lo confirmé: viviré en el campo. El tiempo pasa lento, lo suficiente para disfrutarlo porque creo que la vida se disfruta más si eres consciente de lo que vives y del tiempo que vives cada día. No hay tráfico, no hay vecinos al lado; sólo te encuentras como algunas vez leí con ‘la melodía silenciosa’.

Siento que si vivo toda mi vida en una ciudad mi vida se escapará de mis manos. Se irá tan rápido y mi expresión de todos los fines de año será: “Pero qué rápido se pasó el tiempo”. No quiero decir esa expresión, no quiero vivir así.

Dicen que tienes que exprimir el tiempo y sacarle el mayor provecho pero eso conmigo no funciona. Me estreso fácilmente, es más ahora estoy estresada. No me puedo imaginar mi vida así todo el tiempo, creo que a las finales terminaría muriéndome de poco a poco.

Quiero silencio y tranquilidad, quiero tiempo. Quiero tener tiempo.

Conclusión: Odio la sociedad que hemos construido, odio la vida agitada del siglo XXI.

No hay comentarios:

Publicar un comentario