miércoles, 6 de octubre de 2010

Fresh air



Yo solo tengo un deseo.

Y digo ¿dónde quedó la frase ‘vamos a tomar aire fresco’? ¿Significa lo mismo que antes? No, creo que no. Sólo existe su fantasma.

A medida que conozco más y más las consecuencias de las actividades humanas en el ambiente aumenta mi miedo al respirar, aumenta mi miedo a tomar agua, aumenta mi miedo a comer, aumenta mi miedo a vivir porque no sé si mis actividades cotidianas me están contaminando poco a poco.

Antes no era así y es que pertenezco a una de las generaciones que está sufriendo más las consecuencias de las irresponsabilidades de los seres humanos del pasado. Y eso que no ha comenzado lo peor.

Los últimos años me he dado cuenta que vivo en una fantasía. Vivo en mi pequeño mundo donde casi todo es bueno y normal. No roban mucho, no hay muchas injusticias, no me tratan mal, ‘no’ hay mucha contaminación, ‘no’ hay mucho tráfico. Fantasía, como decía. La verdad es que el Perú, no sabría si generalizar con el mundo, se está jodiendo minuto tras minuto. Robos, injusticias, violaciones, tráfico de drogas, tráfico, tala ilegal, minería ilegal; bueno, la lista es larguísima. El Perú no avanza gente, el Perú se retrasa. Un ejemplo de ello son las pasadas elecciones del domingo ¿una mierda? Sí, una mierda.

¿A dónde quiero llegar? Con todos los problemas sociales, económicos y políticos que sufre el Perú, la tierra paga ¿es justo? No, obviamente que no. ¿Qué culpa tiene el agua de nuestra ignorancia? ¿Qué culpa tiene la tierra para ser salinizada, erosionada o desertificada de esa manera por nuestra irresponsabilidad? ¿Qué culpa tiene el aire para abandonar su frescura? Y por último ¿qué culpa tenemos nosotros, las nuevas generaciones, para sufrir las consecuencias de esos estúpidos imprudentes industriales del pasado?

Estoy llena de furia ¿por qué? Porque no puedo salir y respirar aire puro. Porque no puedo tomar agua pura. Porque no puedo comer alimentos sin insecticidas ni productos químicos. ¿Qué culpa tengo yo para sufrir esto? Ninguna, aunque tal vez una pequeña por ser humana.

Respiro aire con más dióxido carbono que oxígeno. Tomo agua con más minerales venenosos que h2o. Como alimentos ficticios, parecen ser pero no son.

¿Qué clase de mundo es este donde la gente inocente sufre por los que tienen la culpa? Me quitan el deseo que tener hijos porque no sé si conocerán lo que es un bosque, no sé si sabrán lo que es cielo azul, no sé si conocerán el planeta azul.

Lo que hacemos con el planeta es lo que hacemos con nosotros mismos: destruirnos.

Y pensé un día de tantos y lo sigo pensando, el Perú se jodió cuando nos desarticulamos con la naturaleza. Y creo que lo mismo pasó con el mundo.

Sólo tengo un deseo para mi vida: todos tienen que comprender lo importante que es la naturaleza es nuestro mundo. Nosotros no somos invencibles ni superpoderosos. La naturaleza nos domina y nos condicionan. Respeto, es lo único que nos pide a cambio de todo lo que nos da, respeto. El dinero no se come. El dinero no se respira ni toma. Nuevas generaciones, aunque muchos de ustedes no hayan nacido aún, les digo ‘ámenla, porque ella se lo merece todo’. Cuando la sociedad lo comprenda creo que seré la mujer más feliz sobre la faz de la Tierra.

Les escribe la pasión de mi ser.

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